Ginger Bug: El Secreto para Crear Refrescos Fermentados Caseros Llenos de Vida"

Ginger Bug: El Secreto para Crear Refrescos Fermentados Caseros Llenos de Vida"

Hoy quiero hablaros de algo que me tiene fascinada últimamente: el ginger bug. Muchos de vosotros me habéis pedido que hable sobre esto y comparta algunas recetas de refrescos, así que aquí estoy, lista para contaros todo. Si os gusta experimentar en la cocina y sois fans de las bebidas fermentadas, este iniciador natural, que tiene un sinfín de aplicaciones, os va a encantar.

El ginger bug es como la levadura salvaje del mundo de las bebidas caseras. Es una mezcla de jengibre, azúcar y agua que, con un poco de paciencia, se convierte en un probiótico casero. Puedes usarlo para hacer refrescos naturales y súper saludables. Lo mejor es que es facilísimo de preparar, y puedes utilizarlo en un montón de recetas para darle ese toque burbujeante a tus bebidas.

En Naturaleso nos importa la vida saludable, por eso queremos que disfrutes de estos refrescos fermentados caseros, que son una alternativa mucho más beneficiosa que los industriales. Además de ser deliciosos, el ginger bug aporta probióticos que mejoran la digestión y fortalecen el sistema inmunológico.

Receta para hacer tu propio Ginger Bug ( base para refresco)

Aquí te dejo mi receta personal para que hagas tu propio ginger bug en casa.

Ingredientes:

  • Jengibre fresco (2-3 cucharadas rallado)
  • Azúcar (2-3 cucharadas)
  • Agua filtrada o embotellada (1 vaso )

Paso a paso:

  1.  Rallar el jengibre: Empieza por rallar el jengibre. No hace falta que lo peles, solo asegúrate de darle un buen lavado. Necesitas unas 2-3 cucharadas de jengibre rallado para empezar.

  2. Mezclar todo: En un frasco de vidrio limpio, combina el jengibre rallado con el azúcar y el agua. Remueve bien hasta que el azúcar se disuelva.

  3. Tapar y dejar fermentar: Cubre el frasco con una tela limpia o una gasa y asegúrala con una goma elástica. Esto permite que la mezcla respire, pero evita que entren partículas no deseadas. Coloca el frasco en un lugar cálido de tu cocina.

  4. Alimentar diariamente: Durante los próximos 5-7 días, “alimenta” tu ginger bug con 1 cucharada de jengibre rallado y 1 cucharada de azúcar cada día y 1 cucharada de agua. Remueve bien después de cada adición. Verás que empieza a burbujear, lo que significa que las bacterias y levaduras naturales están haciendo su magia.

  5. Listo para usar: Sabes que tu ginger bug está listo cuando está burbujeante y tiene un aroma dulce y ligeramente picante. Ahora ya puedes empezar a usarlo en tus recetas de refrescos.

Recetas de refrescos con Ginger Bug

Ahora que ya tienes tu ginger bug burbujeante, es hora de ponerlo a trabajar. Aquí te comparto algunas recetas que me encantan y son súper fáciles de hacer.

1. Refresco de Limón y Jengibre (Conocido como "Ginger Ale")

Este es un clásico que nunca falla.

Ingredientes:

  • 1 litro de agua filtrada o embotellada
  • Zumo de 3-4 limones
  • 4 cucharadas de azúcar (ajusta al gusto)
  • 1/2 vaso de ginger bug (con un poco del jengibre rallado)

Instrucciones:

  1. Mezcla el agua con el jugo de limón y el azúcar en una jarra grande.
  2. Añade el ginger bug y remueve bien.
  3. Transfiere la mezcla a botellas de vidrio con tapa hermética.
  4. Deja fermentar a temperatura ambiente por 2-3 días, hasta que la mezcla esté burbujeante. Refrigera y disfruta.

2. Refresco de Hibisco y Jengibre

Esta es una opción un poco más exótica y súper refrescante.

Ingredientes:

  • 1 litro de agua
  • 1/2 vaso de flores de hibisco secas
  • 4 cucharadas de azúcar( ajusta al gusto)
  • 1/2 vaso de ginger bug

Instrucciones:

  1. Hierve el agua y apaga el fuego. Añade las flores de hibisco y deja infusionar por unos 10-15 minutos.
  2. Cuela las flores y añade el azúcar a la infusión aún caliente. Remueve bien hasta que el azúcar se disuelva.
  3. Deja enfriar la mezcla a temperatura ambiente.
  4. Añade el ginger bug y mezcla todo bien.
  5. Embotella y deja fermentar por 2-3 días, igual que la receta anterior. Refrigera y disfruta de este refresco floral y burbujeante.

3-Refresco de Fresa y Albahaca

Este refresco tiene un toque herbáceo que te va a sorprender.

Ingredientes:

  • 1 litro de agua
  • 1 vaso de fresas frescas, cortadas en rodajas
  • 4 cuhardas de azúcar
  • 1/2 vaso de ginger bug
  • 10-15 hojas de albahaca fresca

Instrucciones:

  1. En una jarra, mezcla el agua con las fresas y el azúcar. Remueve bien hasta que el azúcar se disuelva.
  2. Añade las hojas de albahaca y remueve suavemente para liberar su sabor.
  3. Añade el ginger bug y mezcla todo.
  4. Embotella y deja fermentar por 2-3 días. Refrigera y disfruta de este refresco con un toque fresco y afrutado.

4. Refresco de Manzana y Canela

Ideal para los días más frescos o si quieres algo con un toque más cálido.

Ingredientes:

  • 1/2 litro de zumo de manzana sin azúcar y 1/2 litro agua embotellada ( también puedes usar solo zumo )1 litro. 
  • 1-2 ramitas de canela
  • 4 cucharadas  de azúcar
  • 1/2 vaso de ginger bug

Instrucciones:

  1. Si usas solo zumo de manzana, no necesitas añadir azúcar. Pero si usas agua, disuelve el azúcar en el agua antes de continuar.
  2. Añade las ramitas de canela a la mezcla.
  3. Añade el ginger bug y remueve bien.
  4. Embotella y deja fermentar por 2-3 días. Refrigera y disfruta de este refresco con un toque especiado.

Consejos Finales

  • Controla la fermentación: Recuerda revisar las botellas diariamente porque la presión puede acumularse. No queremos accidentes en la cocina. ( Sale disparado cual botella de cava) 
  • Sé creativo: Puedes probar con diferentes frutas, hierbas y especias para crear tus propias combinaciones de refrescos.

Así que ya sabes, anímate a experimentar con el ginger bug. No solo estarás haciendo tus propios refrescos naturales, sino que también estarás cuidando de tu salud con bebidas probióticas que son excelentes para la digestión. ¡Salud!

Back to blog